domingo, 18 de agosto de 2024

Jubilarse en el deporte

Si hay algo que los deportes de montaña me han permitido ver y vivir de cerca es que se puede seguir siendo deportista de élite con más de 40 años. Incluso con 50, 60, 70 y, algunas personas privilegiadas, con más de 80. A ningún periodista se le ocurriría preguntar a un o una élite de 40 años de montaña si se va a retirar. No solo por los muchísimos ejemplos de triunfos nacionales e internacionales de deportistas maduros, sino porque algunos corredores de montaña mejoran con el paso del tiempo. 

Por eso me sorprende la unanimidad con la que, durante los Juegos Olímpicos, escuché que había llegado el momento de que el tenista Rafael Nadal, con 38 años, se retirara. No solo en las preguntas a veces impertinentes e inoportunas de los periodistas, sino también en la calle, en el gimnasio y hasta en la piscina de mi comunidad; «Es que está muy mayor». «Es que  se tiene que retirar». ¿Por qué? «Porque tiene 38 años» dicen unos; «Porque ha tenido muchas lesiones y lleva un tiempo sin poder jugar a su nivel habitual» comentan otros. 

Menos mal que  al final el oro olímpico se lo llevó Djokovic con 37 años (un año menos que Nadal) y nos recordó a todos que, aunque la edad cuenta mucho en el deporte, no es lo único. 

En mi opinión, las claves para seguir practicando deporte, e incluso competir con más de 40 años son dos: ser realista con la evolución del cuerpo y esforzarse más. El paso del tiempo es inexorable y los cambios biológicos que conlleva también. Además, se suman las lesiones, las decisiones que se hayan tomado frente a ellas y la suerte que se haya tenido. Los 40 no son los nuevos 20, pero con todos los progresos en entrenamiento, recuperación de lesiones, nutrición y psicología deportiva, se va empujando la edad de jubilación deportiva más y más lejos. 

Dejemos que cada uno elija el momento de retirarse y disfrutemos al ver a deportistas de casi 40 años o más ganar como si tuvieran 20.